A día 16 todavía no puedo decir si sobreviví o no.
Decir 'tres parciales en una semana' parecería resumir todo. Pero de fondo hay más, mucho mas.
Al principio no iba a ser solamente 'tres parciales en una semana', había un agravante: 'tres parciales en una semana de los cuales dos eran el mismo día'. Ocho horas rindiendo, escribiendo con la zurda en un banco para diestros, enroscada como una serpiente, pensando ininterrumpidamente, aguantando hambre y ganas de ir al baño. OCHO. Y tres días para preparar media materia, la restante.
Después pareció alivianarse, ya no iban a ser dos materias en un día; ahora una era el lunes a la noche y la otra el martes bien tempranito. Cuatro horas de rendir, dos horas para llegar a casa, quince minutos entre cenar e ir a dormir , cuatro horas de sueño, dos para llegar a la facu y cuatro horas de rendir again. JOYA . (?)
Entonces, la previa. 'Ocuparse y no preocuparse' fue el slogan bajo el cual minimizé horas de sueño , maximizando horas silla o cama en su defecto. Los días empezaban todos igual y terminaban tres horas antes pero un día después.Reclutada en mi cuarto, medía el paso del tiempo con la cantidad de luz que pegaba sobre la hoja y me dejaba leer o ya no me dejaba ver nada. Cada tanto hacía una excursión al baño o a la cocina para satifacer necesidades biológicas. Lookeada con un pantalón pijama fucsia, una remera simulacion-de-look-fiestero de BY PASS, un cuchuflo en el medio de la cabeza y pantuflas de lana, vivía esta especie de pijama party de a uno y continuado. Y sin pelis.
Y finalmente la semana maratónica.
Lunes: Bromatología. Largo. Tedioso. Dolor de cabeza. Sueño. Nervios.
Martes: FQ (química física).No comments. Liberación parcial. Sentimiento de ya-todo-casi-que-me-chupa-un-huevo.
Miercoles y jueves: Intoxicación cerebral inducida diurna y nocturna. Modalidad de estudio meter-los-conocimientos-a-presión leyendo repetidas veces pero ya sin razonar.
Viernes: Toxicología. Buen humor, sentimiento de YA-CASI-ESTÁ hacía que todo se vea bonito. Mucho sueño y una contractura de la hostia.
Y así terminó. Felíz pero pisándome las ojeras , fui a cumplir con mi ritual post parcial: Cuadras de consumismo por calle Cabildo. Regalitos, Chocolates.
Con gastritis, cafeina en sangre, confusión mental, poca irrigación sanguínea al cerebro producto de la contractura cervical, un pitido en el oido por acostumbramiento al silencio, fotofobia, fobia social.
Sentimiento de liberación fue la mejor recompensa...pero el precio fue alto: podrida, intoxicada y embarazada de un 'ket'.
